domingo, 20 de mayo de 2012

pipipi pipipi pipipi - Suena el despertador.

Ella se levanta. Y en un instante se da cuenta de que nada volverá a ser como antes. No se volverá a levantar pensando en esa persona que durante un tiempo ha  sido su base de felicidad, su alegría, su rutina.
Se va al baño, se mira al espejo y nota que en el reflejo le falta algo. Ah sí! Esa sonrisa con la que solía amanecer. Se lava la cara y esboza una pequeña sonrisa, pero nota que ya nada es igual.

Él mientras tanto, intenta dormir. No ha pasado buena noche. Decide no levantarse de la cama por ahora. Piensa en la decision que ha tenido que tomar junto a ya su ex. ¿Por qué nosotros? ¿Por qué ella? ¿Por qué él? No entiende nada, pero tampoco está seguro de si quiere saberlo. La vida es muy injusta, piensa.

Pasan las horas, con todos y cada uno de sus minutos y segundos... Ambos pegados al movil por si, por algún casual, en un momento decisivo para su futuro, ese movil se decide a sonar. Ninguno está seguro de tomar el mando ante esa situación.
 
Las 11 de la noche, vaya... las 11. Justo esa hora, ese numero, esos dos digitos que saben perfectamente que recordaran con una sonrisa bastante amarga. Ese es su número, bueno... es o era, Quien sabe.

Pasan los días, y con ello, los meses.

Ella ha levantado cabeza, desea encontrar a alguien que no remplace a nadie sino que continue con un distinto principio aquello que con tanto entusiasmo recuerda. Pero sabe que en el fondo de su corazon su recuerdo sigue.

Él, sin embargo parece que levantó cabeza hace ya algun que otro mes, está con una chica, rubia, de ojos verdes, bajita pero grande de corazón. Se parece a ella. Piensa.

Con el paso del tiempo, ambos han conseguido ya estabilizarse con otras parejas que les dan algo que las anteriores no le daban, ambos sienten otra vez que se están enamorando. Pero nada es igual a lo que ya han sentido. Es día 11 de junio. Él decide llamarla, ella sin embargo, piensa en lo que tuvo y que jamás volverá a tener.-Una se da cuenta de lo que tiene hasta que lo piede - piensa ella.

A ella le suena su movil, justo estaba pensando en él. Duda en si descolgar el telefono, no puede, tiene una pareja a la que debe respetar. Él se siente decepcionado, ella no ha querido cogerle el telefono. Pero a los 2 minutros es su movil el que suena, lo descuelga, es ella.

Quedan en unas horas, él va vestido como en su primera cita, ella con el vestido que tanto le gusta.

Sigue habiendo aquella complicidad que un día les unió, ambos se dan cuenta y acaban fundiendose en un beso.

Él le dice que la ama, ella cierra los ojos, le agarra de la mano y le besa.





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